lunes, 20 de abril de 2009

Jugamos a otra cosa?

Llegamos a mi casa por la tarde, después de clase. Trece años.
-Hola mama, hazme un bocata. Ha venido Javi conmigo.

Nos metimos en mi habitación y nos zampamos los bocatas mientras echábamos unas partidas a las damas chinas.
Cuando nos aburrió, uno dijo:
-¿nos hacemos una paja?,
-vale.
Y allí nos pusimos manos a la obra.

Poco después se abrió la puerta, de improviso.
-¿Quereis... t.o.m.a.r...? Mi madre se quedó de una pieza un segundo y rápidamente cerró la puerta otra vez.
Imposible disimular, si retiras la mano es aún más evidente, si la dejas, estás retratado, en fin, un momentazo.

Ninguno de los tres, jamás, hemos hablado de esta situación.

sábado, 18 de abril de 2009

Tema cerrado

Se jubiló León, el único maestro que me ha dejado huella.
Siempre ha sido alegre y animoso, y sigue así. Aprendí mucho con él, me abrió la mente más allá de lo estrictamente académico.

Ahora me vienen unas pocas imágenes, momentos de felicidad que él propició, como la primera vez que, por sorpresa, me pidió que le acompañara a hacer unas gestiones burocráticas, y me llevó de paquete en moto, yo tendría ocho años.

O las primeras salidas, excursiones de varios días a la alta montaña con un grupo de diez o doce niños y niñas, locos de bullicio y excitación. El juego libre de preocupaciones y los primeros lazos de amistad.

Por no hablar de la facilidades económicas que nos dió, cuando mi padre cayó enfermo.

También recuerdo esto: una tarde, yo tendría diez años, me encuentro de pie, en un minúsculo despacho del colegio, abarrotado de papeles, con los pantalones y calzoncillos bajados, y él sentado ante mí, sosteniendo mi paquetito suavemente con su mano. Me habla, no se de qué.
Yo estoy un poco desorientado, pero tranquilo.
Eso fué todo, y la única vez.

En el homenaje que le hicimos un grupo de antiguos alumnos, dijo unas palabras. Sólo recuerdo un fragmento en el que rechazaba las alabanzas por exageradas: "he hecho lo que he podido, algunas cosas buenas y algunas burradas".
Por si quedaba algún cabo suelto, a mí me vale con eso.

martes, 14 de abril de 2009

Octogeteens

Comiendo, mi madre me dice: yo estoy mejor que tu suegra, verdad?. Ella está más encogida.
Cenando, mi suegra dice a su hija: yo estoy mejor que tu suegra, verdad?. Ella está más arrugada.

lunes, 13 de abril de 2009

Continuo

Astronomía, física, mística, paleontología, antropología, biología.
Los tres reinos: mineral, vegetal y animal.
Los humanes somos una novedad en la evolución, no sólo de las especies, sino del universo entero.
Un hito comparable con la formación de las estrellas o con la aparición de la primera bacteria.
Lo nuestro no es la fotosíntesis, ni hemos inventado el sistema nervioso, pero lo hemos desarrollado hasta un punto nuevo.
Somos conscientes, el cosmos se da cuenta de que existe y de que no para de evolucionar.

Hacia donde estamos evolucionando nosotros?
La consciencia también nos dice que hay demasiado sufrimiento y malestar en nuestra especie, que quizá nos hemos desorientado.
Busquemos más norte. Vamos a confiar en algo fiable, demos más protagonismo al instinto.
Bien mirado el instinto de la bacteria nos ha traído hasta aquí, no está mal como currículum.

sábado, 4 de abril de 2009

No aguanto más

Siete u ocho veces me he salido del cine a media película.
Todas por aburrimiento excepto dos, y las dos veces fué la misma cinta: Saló o los 120 días de Sodoma, de Pasolini.

Toda la película es dura de ver, pero la jornada de la sangre se me hizo insoportable. La crueldad me pone malo, y esa película me llevó a mi límite.

miércoles, 1 de abril de 2009

FUERZA

La habitación quedó destrozada.
Sobre las estanterías no quedaba más que una foto enmarcada, caída boca abajo, todo lo demás estaba en el suelo.
Una silla reducida a astillas, con la que había golpeado mesa, puertas, lámparas.
Y él destrozado también, llorando en el suelo, tapándose la cara con las manos magulladas que aun tenían enredados algunos restos de su propio cabello.
Él, que siempre se ha tenido por débil.

viernes, 27 de marzo de 2009

CUIDADIN

M, 36 años, alto, culto, guapetón, por motivos laborales viaja con frecuencia a una ciudad alemana.
Le llaman de dirección porque, al pedir la reserva para el próximo viaje, en el hotel habitual lo rechazan. Escuetamente, por haber sido declarado persona non grata en ese establecimiento.

Me cuenta que le costó encontrar en la memoria una razón: en el último viaje le tiró los tejos a una empleada, no pudo ser otra cosa.